martes, 29 de diciembre de 2015

La Curiosa Historia de un Don Nadie Especial (1era parte)

Las hojas caen tristes como las lágrimas de un niño herido, son sus lágrimas las que anuncian la nueva de un frio que se aproxima a nosotros. Un viento gélido rozando mi rostro trae a mi mente recuerdos de días que se fueron sin gloria pero aún así, merecen el tiempo de la memoria aunque sea muy corto, porque fueron días que pasaron igual que la vida de muchas personas que ya no están y que nadie recuerda y aun hoy yacen sin tumba ni flores que les digan que fueron importantes. 
Algo raro tiene este viento, creo que me acaba de cortar en la cara, ¿será posible que realmente esté tan frío como para hacer eso? No hay duda, tengo un corte en la mejilla izquierda, acabo de tocarme porque me está ardiendo y mis dedos están manchados de sangre; no entiendo ¿como es posible que el viento esté tan frío? Es raro y extrañamente emocionante. Hay una luz en el cielo, brillando debajo de las nubes que lo cubren completamente así que no puede ser Sol. No veo a nadie volteando hacia allá, también es raro; le he preguntado a un tipo que va pasando que si sabe que es lo que está en cielo, el voltea y me pregunta «¿que cosa, las nubes?» me doy cuenta que no ve nada y lo dejo ir. Otro tipo viene y le pregunto lo mismo, con una sonrisa que demuestra extrañeza y al mismo tiempo refleja a una persona amistosa me responde «son las nubes», su sonrisa me da la confianza de replicarle acerca de la luz azulada que se ve moviéndose en lo alto «Lo siento amigo pero yo no veo nada». Yo sigo insistiendo y entonces su rostro cambia por completo mostrando un terror inmenso. Volteo nuevamente hacia arriba y me doy cuenta que la luz creció considerablemente,
y seguía haciéndolo; “¿Una explosión?" me pregunté a mi mismo. Una inmensa masa de aire fría cae sobre todos, el chico que vio el estallido antes que yo me jaló por la muñeca, me tiró al suelo y se puso sobre mi, recibiendo él la mayoría de la fuerza de impacto del aire en la espalda, pero no lo resistió tanto pues a los tres segundos cayó completamente sobre mi. El evento no duró ni un minuto, pero fue tan intenso que cuando abrí los ojos me di cuenta de que todo el mundo estaba en el suelo. Pensé en quitarme a ese chico de encima pero el lo hizo por si solo en el momento en el que me moví «¿Te encuentras bien?» “Si, pero, ¿tú estás bien?" «No estoy muy seguro, pero creo que si. ¿Qué rayos ha sido eso?» seguíamos en el suelo, pero ya sentados, el volteó hacia todos lados y al ver hacia atrás vi que su ropa estaba hecha trizas de la espalda, como si la hubiese roído un ratón. No pude evitar preguntarle si así era o había pasado en el momento, «acaba de suceder, el impacto fue demasiado fuerte. ¡Rayos! siento como si tuviera agujas de hielo clavadas en toda la espalda.» Se tocó con las manos por dentro pero no sintió nada, “Debió ser porque el aire estaba muy frío y cayó con mucha fuerza, a mi me partió el cachete hace un rato.” –Señale mi mejilla herida– “Cielos, creí que iba a morir.” «Si,  yo también pensé lo mismo, que suerte que no sucedió ¿no crees?» Se puso de pie y después me ayudó a hacerlo yo también, vimos la escena de lo sucedido y todo se veía destruido. Las lámparas de las calles, los cristales de los coches y las ventanas, todo eso estaba echo añicos en el suelo. Parecía como si un huracán hubiera pasado por el lugar. “Definitívamente creo que fue una suerte que no hayamos muerto, aún hay muchas cosas que me gustaría hacer antes de que eso ocurra. No me gustaría morir sabiendo que nadie me recordará en el futuro" «Suena como... a que tienes una crisis existencial» “Si, acabo de desarrollarla, antes de ver la luz en el cielo, iba pensando precisamente en toda la gente que muere sin ser recordada. ¿No crees que es triste vivir y trabajar duro, esforzándose durante tanto tiempo para que al final, no te sirva de nada?"
«Al final lo único que queda son los buenos recuerdos y la satisfacción de una buena vida» “Y después de eso nada, te recordarán tus hijos, probablemente tus nietos, pero ¿y después? Pasas a ser parte de la nada, del olvido ¿no crees que eso es deprimente?" «¿Sabes algo? Yo creo que te hace falta un buen trago. Vamos acompáñame, busquemos algún bar cerca que no haya sido afectado por esta catastrofe» “¿A... Así sin más? ¿no vamos a ayudar a alguien aquí?" «Ya todos están de pie, voltea a ver. No le paso nada a nadie mas allá de su ropa, si algo grave hubiera pasado, esto sería un completo caos ¿no crees? No hay más que daños materiales, así que ¿Por qué no ir a tomar un trago?». Me pregunté ¿hacia dónde veía él? Porque lo que yo veía era un escenario complétamente caótico, aún así lo seguí. Caminamos solo unas calles más, las ambulancias comenzaron a llegar a aquel lugar y nos dimos cuenta que esa presión de aire solo había afectado aquella zona, pues todo lo demás parecía estar intacto; «Raro, ¿no te parece?» “Bastante"...

martes, 21 de abril de 2015

Un cuento de hadas

PREFACIO

Mi nombre es Fidel y soy un hada... ¿Qué como lo sé? Debo decir que fue un proceso doloroso, ya que he sido criado por padres humanos. Al momento de mi nacimiento me pusieron bajo un hechizo con el que parecería humano hasta que llegara el momento de saber cual es mi papel en el mundo. El cambio ya ocurrió, pero yo sigo sin saber cual es mi razón de existir. Para que se den una idea de lo que sufrí, me parece conveniente relatar todo lo que ha venido ocurriendo desde antes, aunque debo advertir que habrá ciertos sucesos en está historia que me harán ver como un malo de cuento, pero lo cierto es que quien me conoce bien, sabe que en realidad soy una buena persona; en fin, espero que mientras cuente mi historia, me de una idea de lo que debo hacer con el poder que ahora se que tengo y la vida para la que nací aunque estoy seguro de que seguiré en la misma situación por lo que seguramente sabrán también lo que pasa al tiempo que lo vivo ya que antes de saber que era un hada no ocurrió mas que la vida de lo que se consideraría una persona normal.
  Pues bien, lo raro comienza desde aquí: para empezar, mi cabello es azul, entre cielo y rey, es completamente liso y me encanta; mis ojos son de un color azul turquesa (una gran combinación con mi cabello), y mi piel es de un tono pálido, estoy blanco: no güero ni rosado, blanco. Tengo 17 años y una estatura de aproximadamente 170 cm, y otra curiosidad sobre mi es que aun a pesar de que no hago ejercicio fuera de las clases de deportes tengo un cuerpo que da envidia ;) ok la verdad es que si hago ejercicio (es  necesario cuando practicas karate) y eso solo lo menciono por ser ególatra XD. Como sea creo que es hora de relatar lo que me parece que quieren saber (o lo que me interesa contar)

martes, 17 de marzo de 2015

27/12/2014

     Esta madrugada destruí el mundo y lo volví a hacer (rehacer) a partir de mi mismo antes de que todos se dieran cuenta (¿cómo se darían cuenta? si los destruí). Ahora todos tienen una parte de mi y por lo tanto, ustedes son míos (me pertenecen) y cuando mueran volverán a mi y entonces estaré completo nuevamente; entonces y SOLO ENTONCES podré ser juzgado por tal acto.
     Esta madrugada destruí el mundo y a partir de mi lo volví a construir sin que se dieran cuenta, ahora todos me pertenecen (solo espero haber dejado bien su memoria puesto que yo no la conocía, hice lo que pude para que quedara igual que antes pero si alguno de sus recuerdos les es extraño, entonces también les es ajeno y probablemente me pertenece).
   Cuando mueran, todos volverán a mi y entonces estaré completo y podre así ser juzgado completamente por haber hecho tal acto que solo Dios está designado a hacer y solo Él tiene dicho derecho y solo Él me juzgará cuando mi momento llegue y me juzgará junto a ustedes porque, aunque yo los hice después de destruir el mundo, Él los hizo antes que yo. Cuando los hice nuevamente sus almas ya no volvieron a sus cuerpos, sino que mi alma fragmentada les dio vida a sus cuerpos inertes.
    Así sea pues que al final del tiempo yo estaré entre ustedes e igual que ustedes seré juzgado.